
31 May Mi hijo/a no quiere dormir ¿por qué?
Llega la hora de dormir, después de un largo día estas deseando caer rendido en la cama, pero, tu hijo/a no quiere ir a dormir.
Esta semana os he contando un poco la experiencia con mis hijas, pero Instagram no permite escribir mucho texto. Hoy, además de contaros mi experiencia, os dejaré algunas razones por las que vuestros hijos se niegan a ir a dormir, y qué podéis hacer para que ese momento sea más placentero.
Mi experiencia
Como muchos ya sabéis tengo dos hijas, Carolina de 7 años y Sofía de 2 años. Cuando nació Carolina decidimos que yo dejaría mi trabajo como diseñadora gráfica para poder dedicarme en exclusiva a su cuidado, decisión de la cual no me arrepiento, disfrute de ella y aprendí mucho sobre crianza, aunque había momentos duros, no os lo voy a negar.
Carolina para muchos ha sido un “bebé trampa”, dormía bien, comía bien, “se portaba bien” (no sé como puede un bebé portarse mal, pero eso es otro tema que da para otro post). Yo siempre me preguntaba si solo había tenido suerte o nuestra forma de crianza había tenido algo que ver.
Desde que nació nos centramos en respetar sus horarios, observar sus señales de sueño y aprender de su comportamiento para poder adaptarnos lo mejor posible. Fue un cambio considerable, pasamos de ser dos adultos disfrutando de cenas con amigos, viajes improvisados, tardes de no hacer nada… y ahora éramos 2 adultos con un bebé que tenía otras necesidades (como dormir pronto, creo que eso es lo que más nos costo aceptar).
Había dos opciones, intentar incluir a nuestra hija en todos los planes o que nosotros nos adaptásemos a sus horarios. Decidimos lo segundo, nuestros hijos no son bebés eternamente. ¡Ojo! seguíamos quedando con amigos, pero no a cenar a las 22:00. Viajábamos muchísimo, pero con algo más de preparación y aprovechando las siestas de Carolina. Pasábamos tardes de no hacer nada, tumbados en una alfombra en el suelo jugando con nuestra hija.
A Carolina le encanta dormir. Cuando era bebé solo necesitaba de nuestra presencia para conciliar el sueño, ahora, con 7 años ya no nos necesita. Es capaz de decidir dormir una siesta a medio día si ha madrugado mucho y por la noche tenemos planes.
Sofía, ayyy…. Sofía, mi niña inquieta. Duerme muy bien desde bebé, no le ha gustado dormir en brazos, pero le cuesta irse a dormir. Cuando nació Sofía también decidí dedicarme en exclusiva a su cuidado y al de su hermana. Durante ese tiempo aprendí mucho sobre crianza y me interesé todavía más por el sueño en la infancia. Sofía era una bebé con carácter, inquieta.. y “tan dormilona como su hermana”, podía ser así? es decir, otra vez la genética o tenía que ver algo nuestra forma de crianza?
Con Sofía nos hemos tenido que esforzar mas, si se pasaba la ventana de sueño podías entrar en el infierno. Además era más difícil identificar cuándo tenía sueño.
Al comenzar a hablar se vio capaz de tomar decisiones, nunca quería ir a dormir. Es una niña de carácter que te hace saber que algo no le gusta, dormir no le gusta, pero no pelea a la hora de ir a dormir, que importantes son las rutinas!!!
Así que mi conclusión es que si hay algo que podamos hacer por nuestros hijos para mejorar su descanso, y el nuestro, hagámoslo!!!
Razones por las que no quieren ir a dormir
Esta sobrecansado: sobre las 19:00-20:00 los niños comienzan a mostrar señales de cansancio, pero a muchas familias les parece que es demasiado pronto. Pasada la ventana de sueño comenzará a segregar cortisol en vez de melatonina para poder mantenerse despierto. Llevar un horario regular de acostar y levantar, incluir rutinas antes de dormir y respetar sus señales de sueño ayudará a conciliar mejor el sueño.
No esta cansado: por el contrario cuando ha dormido una siesta cerca de la hora de acostar o una siesta demasiado larga para su edad, no tendrá suficiente presión de sueño para poder dormir. Ajusta la hora de la siesta y la duración para evitar que estéis mucho tiempo intentando que duerma.
No quieren perderse nada: A veces sienten que dormir es una pérdida de tiempo y que hay muchas cosas divertidas por hacer. Una vez que acuestes a tu hijo, mantén un ambiente tranquilo en casa, baja el volumen de la televisión si vas a ver un serie, cierra la puerta de la cocina si estas fregando o cocinando para el próximo día.
Tienen miedo: Los miedos aparecen a partir de los 2 años, a veces incluso antes. Es posible que necesite un luz para dormir (mejor roja para no bloquear la segregación de melatonina). Si le asustan los sonidos de la calle o de otros vecinos puedes utilizar ruido blanco.
Ansiedad por separación: te pide un cuento detrás de otro, luego un vaso de agua, tiene pis otra vez… es posible que no quiera que te vayas de la habitación. Establece unos límites claros (solo un cuento, pis antes de entrar en la cama…) y quédate en su habitación hasta que concilie el sueño, hazle sentir que estas ahí y que si te necesita durante la noche acudirás.
Consejos para mejorar la hora de ir a dormir
Ajusta las duración de las siestas y el horario.
Incluye juego tranquilo antes de cenar para bajar las revoluciones.
Lleva un horario regular de acostar y levantar adecuado a su edad.
Incluye rutina relajante antes de acostar, al menos 30 minutos.
Mantén un ambiente tranquilo en casa después de acostar a tu hijo.
Hazle sentir que estas ahí y que acudirás si te necesita durante la noche.
Si no sabes como hacerlo, tienes alguna duda… Escríbeme!!!
Y si lo que quieres es más información sobre el sueño infantil sígueme en mis redes sociales, descárgate mi guía sobre sueño infantil y no olvides suscribirte a mi Newsleter.